Al menos esta vez no se ha puesto una camiseta tan ajustada que le impidiera respirar, aunque su canalillo sí que dejaba sin respiración a cualquiera que se la encontrara por delante.
Eso sí. Mirad por favor el punto choni poniendo entre pecho y pecho su móvil. Ahí se le sujetará perfectamente, aunque igual se le calienta por estar tan encerrado y le dará gustillo cuando vibre. Pero en serio, hay que ser muy horterilla para colocarse el móvil ahí.
La cantante dio a luz a su hija Maxwell Johnson el pasado mes de Mayo, pero aún así tiene todos los kilos de más encima que ganó durante el embarazo. Fueron más de 20, y es que se permitió todo lujo de excesos, y claro, como no se cuidó para nada, ahora le toca volver al gimnasio a hacer sesiones intensivas y volver a recuperar parte de su tipín.
Obviamente, a medida que adelgace, irán bajando de volumen sus encantos femeninos, ya que son lo primero que crecen cuando engordamos y lo primero que se deshincha cuando adelgazamos. Así que disfrutemos de la vista si es que somos de los que nos gusta ver escotes enormes y potentes.
Y como es famosa y tiene que bajar de peso, qué mejor que aliarse con Weight Watchers y así quitarse kilitos de más mientras le pagan por promocionar la marca. Todo redondo. Ya les gustaría tanto a ella como a Hilary Duff (otra que engordó lo suyo durante su estado de buena esperanza) tener los genes de Miranda Kerr, que quedó estupenda a los dos meses de dar a luz.